Crumble de manzana
27.03.2022
El crumble es muy fácil de preparar, se puede tomar tanto frío como templado y acompañarlo con una buena taza de té o café humeante para alegrar un desayuno o merienda de domingo. El más clásico es el de manzana, pero podéis añadirle también pera o cualquier fruta de temporada. Sobre la fruta se coloca una capa crujiente preparada con harina, mantequilla, azúcar y canela, en mi caso he sustituido la harina por almendra molida.
Ingredientes:
- 3 manzana grandes (la variedad que más os gusten)
- 30 g de azúcar moreno
- 80 g de mantequilla +15 g más para cocinar las manzanas
- 110 g de almendra molida
- El zumo de 1/2 limón
- Una cucharadita de canela
- 1 cucharada de azúcar blanco o edulcorante
Elaboración:
Pelamos y cortamos en trozos medianos las manzanas. Añadimos el jugo de limón para que la manzana no se oxide y mezclamos.
Derretimos 15 g de mantequilla en una sartén. Añadimos las manzanas y el azúcar moreno. Salteamos, mezclando de vez en cuando, a fuego medio hasta que las manzanas se ablanden un poco. Añadimos la canela, mezclamos de nuevo y retiramos del fuego.
Colocamos las manzanas en el fondo de un molde apto para el horno y repartimos bien.
Para preparar la cobertura crujiente, fundimos los 80 g de mantequilla y mezclamos con la almendra molida y el azúcar blanco o edulcorante.
Repartimos el crujiente sobre la manzana.
Horneamos en el horno precalentado a 180 grados durante 30 minutos.